La Hermandad de Legionarios homenajeó la noche del martes en Barcelona a Víctor Láinez, fallecido en Zaragoza a causa de una agresión que se produjo al salir de un bar de Zaragoza. El motivo que baraja la Policía son los tirantes con la bandera de España que llevaba la víctima.

El fallecido entró en el local con unos amigos y comenzó a discutir con el agresor por cuestiones ideológicas. La víctima era falangista y el presunto agresor antisistema.

Al salir, recibió el golpe con un objeto contundente que lo dejaría en coma y finalmente provocaría su muerte tras varios días en el hospital. "Víctor era un simpatizante falangista", cuenta Norberto Picó, Jefe Nacional de Falange Española.

El supuesto agresor, detenido desde el lunes, ya fue condenado por otro ataque que dejó tetrapléjico a un agente de la Guardia Urbana de Barcelona. El caso derivó en un documental, Ciutat Morta, que ponía en tela de juicio la investigación.

El ministro de Interior y diputados de diferente signo político han condenado este tipo de ataques. "Quiero vivir en un país en el que nadie sea agredido por llevar una bandera", manifestaba Zoido, mientras que Rufián ve "intolerable que sucedan este tipo de cosas".

La Policía ha detenido a otra persona para tomarle declaración, y ya lo ha puesto en libertad. La investigación por la muerte de Láinez continúa.