La ciudad polaca de Swidnik se quedará sin nueve millones de euros en ayudas europeas. El motivo: formar parte del vergonzoso mapa que identifica las zonas libres de LGTBI en el país y aglutina a un centenar de ayuntamientos. Entre ellos, la nombrada Swidnik, que viene a ser la representación pública de la homofobia en el país. "Como las autoridades políticas han dicho que el colectivo LGTBI no es bienvenido en la zona, sus habitantes pueden verse alentados a cometer actos discriminatorios o violentos con ellos".

Así lo ha denunciado Kamil Maczuga, activista LGTBI y cofundador del 'Atlas del odio'. Se trata de una autoproclamación que ya tiene sus consecuencias económicas. Y todo por autodenominarse "libre de ideología LGTBI". Una sanción económica que hizo saltar las alarmas en el pleno del propio Ayuntamiento. La oposición pidió por cuarta vez que se retirara esta denominación, pero su alcalde se negó.

Su argumento: dice que "no le interesa la vida sexual de sus habitantes" y que "no quiere saber la orientación de cada uno durante las 24 horas del día". Para Rubén López, responsable internacional del FELGTB, están "legitimando el discriminar a las personas LGTBI. Les están mandado un mensaje muy claro: no son bienvenidas". Otros sí que han dado marcha atrás, como el propio pueblo de Kamil: "Ante la posibilidad de perder las ayudas, mi pueblo natal decidió retirar esta denominación".

Pero como Swidnik, más de una centena de regiones del centro, sur y este de Polonia se consideran libres de esta ideología. Sobre el papel no significa nada, pero ampara una discriminación asentada en el país desde 2019. "En todos los índices, apunta a ser el peor país de la UE para poder vivir como persona LGTBI", ha apuntado Rubén López. Una situación que ha sufrido en sus propias carnes Kamil.

"Cuando salí del armario y la gente de mi pueblo natal fue consciente, empecé a recibir amenazas de muerte", ha relatado. Se trata de un odio ultraconservador que obliga a este colectivo a no tener más remedio que marcharse de su hogar.