El conserje del pabellón municipal de Buñol (Valencia) acabó herido en el hospital después de recriminar al dueño de un can que llevara sin atar un perro de raza peligrosa. El presunto agresor paseaba al animal sin correa pese a que su can había originado varias denuncias por los vecinos de la zona.

El dueño del can se tomó mal las advertencias del conserje y acabó asestándole un puñetazo y una patada en la cara. Unos vecinos socorrieron a la víctima, que tuvo que ser atendida por los servicios sanitarios y tendrá que ser operado por la rotura del pómulo y la lesión de la nariz. La guardia civil ha abierto diligencias para esclarecer lo sucedido.