Una pareja estadounidense se encontraba de vacaciones en las Great Smoky Mountains, en Tennessee, cuando tres cachorros de oso negro entraron en su cabaña y se bañaron en la bañera de hidromasaje, situado en el porche.

Según publica 'The Sun', al ver a un oso en el exterior de la cabaña metido en el jacuzzi dándose un baño. La pareja corrió hacia la ventana y su sorpresa aumentó al ver, no a uno, sino a tres osos.

Los animales se encontraban en esa zona montañosa que resulta su hábitat natural. "Fue muy bonito, así que les dejamos disfrutar durante un minuto. Luego siguieron su camino de forma alegre", dijo a 'Fox 8' la autora de las fotos.

Sin embargo, el Servicio de Parques Nacionales advirtió a los turistas que, a pesar de tratarse de animales "adorables y tiernos", son muy peligrosos e impredecibles. Por ello, recomendaron a los turistas mantener precaución ante un posible encuentro con ellos. "El acercamiento voluntario a 150 pies o a cualquier distancia que perturbe al oso es ilegal en el Parque Nacional de las Grandes Montañas Humeantes", explican en su página web.

La población de osos negros en Tennessee ha aumentado de manera exponencial en los últimos años. La Agencia de Recursos de Vida Silvestre de Tennessee estimó la existencia de unos 7.000 en la zona.