Cuando entró en una cárcel de EEUU, Diana, una joven de 26 años, dijo que estaba embarazada de ocho meses y que tenía contracciones, sin embargo no le prestaron ningún tipo de atención.

Durante seis horas esta mujer tuvo que soportar intensos dolores mientras las contracciones iban en aumento ante la inacción de los responsables de seguridad de la cárcel.

Una cámara de vigilancia captó cómo la mujer se subió a la cama, colocó un empapador, se quitó la ropa interior y finalmente acabó dando a luz sola retorciéndose de dolor.

Cuando llegó un médico hasta la celda, simplemente se limitó a sostener la cabeza del recién nacido.

"Lo que más me duele es que a nadie le importó"

"Me sentí impotente porque nadie me ayudó a pesar de que había allí mucha gente. Nadie levantó un dedo", ha explicado la mujer a la cadena KDVR. "El dolor era indescriptible, pero lo que más me duele es el hecho de que a nadie le importó", ha añadido.

La abogada de Diana critica duramente el trato recibido por su clienta en un momento así: "La falta de compasión es asombrosa".

La cárcel ha abierto una investigación

Los hechos ocurrieron en una prisión de Denver, Estados Unidos hace un año. Sin embargo, ahora ha sido cuando las imágenes han salido a la luz después de que la madre haya presentado una denuncia, según informa The Sun.

Tras el escándalo, los responsables de la prisión han mostrado su compromiso a abrir una investigación para esclarecer los hechos.