Un hombre ha muerto tras recibir el disparo de otro por un posible ajuste de cuentas en las puertas de un cementerio el día de Todos los Santos. Víctima y agresor son miembros de dos clanes gitanos que podrían ser rivales.

Hasta seis disparos han oído las personas que se encontraban en esos momentos dentro del campo santo, entre ellos el propio conseller Santi Villa, que estaba presidiendo una ofrenda floral,y la alcaldesa de Figueres. "Estábamos acabando el acto cuando hemos visto un movimiento de gente que venía asustada  y hemos oido los disparos", ha declarado la mandataria.

Según los Mossos d´Esquadra, el agresor disparó dos veces y cuando la víctima se encontraba en el suelo apretó el gatillo cuatro veces más. Inmediatamente después del tiroteo, los agentes que se encontraban en el acto institucional, detuvieron al autor del homicidio.

En controles posteriores han detenido a un hombre que se intentaba dar a la fuga por conducción temeraria y otra mujer, que esperaba en un coche al autor de los disparos para escapar del lugar del crimen.