El menor con parálisis tiene nueve años. No camina. No habla. El otro día volvía a casa con dos monitoras desde una piscina de Getafe, en Madrid. Al coger el autobús, el conductor se negó a subir el carro de Alejandro. Las monitoras, atónitas, tuvieron que esperar casi una hora al siguiente autobús. Todo esto ha sucedido a pesar de que los autobuses están adaptados y obligados a facilitar el acceso a personas con discapacidad.
El grupo 'Avanza', responsable de esta línea de auobuses, ya se ha puesto en contacto con la madre del menor para pedirle disculpas. La empresa ha abierto un expediente disciplinario al conductor y le ha cambiado la ruta.