Algunos más, otros menos, pero todos nosotros lo hemos estado alguna vez. La RAE lo define como el “sentimiento intenso del ser humano que, partiendo de su propia insuficiencia, necesita y busca el encuentro y unión con otro ser”. En otras palabras, la dependencia emocional de nuestra sociedad a ese sentimiento que ‘necesitamos’: el amor romántico.

Pese a que la libertad de las mujeres está a la orden del día, seguimos encadenadas a lo que más nos hace sufrir: el romanticismo. Desde pequeños, sobre todo ellas, hemos socializado con el gran peso que el amor tiene en nuestra vida. Esa fuente de felicidad absoluta que deja al margen el resto de ‘amores’: familia, amigos o trabajo. Todos esos aspectos de nuestra vida pasan a un segundo plano si se trata del amor.

Hoy, en el Día Mundial del Soltero, te desmontamos los mitos del amor romántico y te explicamos por qué estar enamorado no es lo ‘mejor que te puede pasar’.

Los males del amor tradicional

Muchos de nosotros hemos caído inevitablemente en estos mitos que idealizan el amor romántico y afectan a nuestra vida. Coral Herrera, autora de libros como ‘Dueña de mi amor: Mujeres contra la gran estafa romántica’ (Catarata, 2020), ‘Mujeres que ya no sufren por amor’ (Catarata, 2018) o ‘La construcción sociocultural del amor romántico’ (Fundamentos, 2011) explica en su blog las mentiras que nos ‘venden’ del amor.

  • Los ‘para siempre’ no existen

Si hay algo con lo que tendemos a relacionar el amor es con el tiempo. Creemos que si el amor es ‘bueno’ puede durar toda la vida. Pero no, desmontemos ese mito: el amor dura lo que dura. Algunas relaciones duran años, otras meses e incluso otras duran escasos días, como explica Herrera. En el mundo se separan y divorcian parejas constantemente y las estadísticas aumentan cada año. El amor surge, cambia, se deteriora, se transforma, evoluciona o muere. Y la vida sigue igual, porque ni es para siempre ni hay un solo amor en nuestras vidas. No debemos olvidar el presente para pensar constantemente en el futuro, recalca. El amor es disfrutar del aquí y del ahora.

  • El amor lo puede todo… ¿o no?

Sí, el amor es un sentimiento muy bonito pero basta ya de idealizarlo. Herrera considera que hay cosas con las que ningún amor, por verdadero o fuerte que sea, puede ni tolera: los malos tratos, la violencia o las relaciones que no funcionan. Derribemos el mito de “quien se pelea se desea” o “quien bien te quiere te hará llorar” porque no es así. No es cierto, nadie te trata mal por tu bien y si lo hace es porque no sabe quererte bien, señala. Es necesario romper la unión de sufrimiento y amor, dos palabras que parece que muchas veces van de la mano.

Nos empeñamos en aferrarnos a la idea utópica de que, si es amor de verdad, puede con todo y la realidad es bien distinta. Lo único que conseguiremos es frustrarnos pensando qué estamos haciendo mal para que nuestra relación no funcione cuando sí debería.

  • El amor cambia a las personas

Es cierto que el hecho de estar enamorados nos provoca sensaciones distintas y muchos suelen decir erróneamente que nos cambia. Pero nada más lejos de la realidad, el amor no convierte mágicamente a las personas. La idea de que podemos cambiar a nuestra pareja si le dedicamos esfuerzo es contraproducente y desgastador para nosotros. No convierte en personas pacíficas a personas violentas, ni ‘cura’ la gente celosa, explica.

Por eso mismo, la autora madrileña expone que no estamos condenados y condenadas a sufrir por amor. Es totalmente lícito distanciarnos si nuestra pareja no nos conviene, no nos corresponde o la relación nos duele. El amor no ata ni limita.

  • El complejo de Penélope

En la mitología griega es muy conocida la historia de Penélope y Ulises, a quien ella esperó su regreso durante más de 50 años. Hoy en día no son pocas las personas, sobre todo mujeres, que no superan la idea de que su relación se ha roto y viven eternamente esperando a que su pareja vuelva. Esta idea está muy ligada a la anterior, si en vez de volver esperamos a que nuestra pareja cambie mágicamente. Pero no, no tenemos toda la vida para esperar ni la paciencia y salud mental que eso requiere, afirma Herrera en su blog. De nuevo, el amor es aquí y ahora.

  • No hay ningún ‘tren del amor’

La idea de que, con el paso de los años, se te ‘pasa el arroz’ si no encuentras pareja está muy extendida, especialmente en la parte femenina. Es preferible cambiar ese dicho por “el amor no tiene edad”, porque realmente es así. Como señala Herrera, nadie establece una edad para enamorarse, emparejarse, casarse o tener hijos. Es más, tener pareja no es algo obligatorio y totalmente necesario para desarrollar tu vida, recalca. Tendemos a depositar todo el peso de nuestra vida en base a un único tipo de amor, el amor romántico, y cuando nos falta nos vemos solos. Pero no es cierto, hay mucha gente a tu alrededor y mucha gente por conocer.

[[H3:Entonces, ¿existe realmente la ‘media naranja’?]]

Mientras se acerca una de las fechas más esperadas del año para muchos, el Día de los Enamorados, muchos solteros temen no llegar a encontrar nunca su ‘media naranja’. Seguro que tú también lo has escuchado en muchas ocasiones cuando hablamos del amor. La idea de encontrar a alguien que nos complemente y que nos ofrezca todo aquello que, por nosotros mismos no tenemos, está muy aceptada. Pero, ¿realmente existe esa ‘media naranja’?

No, no existe. Tu vida sigue estando completa con o sin pareja y hacer que dependa únicamente de ello es un error. Es preferible pasar de la ‘media naranja’ al ‘racimo de uvas’. Es decir, hacer que nuestra relación o el amor sea solamente una uva más del racimo que representa nuestra vida. Por eso, como el amor no dura eternamente, si acaba no nos sentiremos incompletos o vacíos. El peso que debe tener en nuestras vidas el lado romántico debe ser equitativo al de los amigos, la familia, éxito profesional o hobbies. Si te encuentras soltero, posiblemente inviertas este tiempo en otras cosas que también te beneficien.

Además del tiempo que estando sin pareja podemos dedicar a los demás, lo más importante es el tiempo que nos podemos dedicar a nosotros mismos. Muchas personas encadenan relaciones, una tras otra, sin pasar realmente tiempo a solas y llegar a conocerse. Un tiempo de soltería no viene mal para saber qué queremos realmente y qué no queremos, lo que nos gusta y lo que no. En la vida habrá momentos en los que tendremos que estar solos y no debería ser el fin del mundo. Conócete y disfruta contigo mismo.

No podemos olvidar que hemos nacido y crecido con el referente del amor en nuestras vidas y es inevitable que caigamos en estos mitos que explica Herrera. Pero también es necesario saber que el tan ansiado amor no es tan importante como tendemos a creer e incluso puede liberarnos. Por eso, si no tienes pareja no te preocupes y este 13 de febrero disfruta de ‘San Solterín’.