Camina con bastones, no puede vestirse ni ducharse solo y necesita ayuda para comer. Son las secuelas que el coronavirus le ha dejado a Luis Enrique. El 'bicho', como él lo llama, lo tuvo un mes ingresado en la UCI y otro en planta. Tras recibir el alta, lleva tres meses acudiendo todos los días al hospital para seguir con la rehabilitación. "Me tienen que trabajar cadera, rodillas... todo el cuerpo", explica a laSexta.

Una situación similar a la que vive María Jesús. Después de su ingreso largo por COVID-19 continúa con los ejercicios de movilidad en casa. "Todavía no me agacho bien, ando poquito porque me canso y tengo que ir buscando puntos para descansar", apunta.

Tienen mucho trabajo por delante. Los problemas de movilidad tras el coronavirus pueden requerir hasta seis meses de rehabilitación y, si los afectados tienen más de 70 años, es posible que no los puedan dejar nunca. "Se te olvida caminar, se te olvida todo. Es increíble, pierdes un montón de masa muscular que se debe recuperar poco a poco", afirma José Luis Luján, director de Fisioterapia Luján. Los fisioterapeutas insisten en que el ánimo es fundamental para una recuperación total. El objetivo, volver a ser los de antes de la pandemia.