Las mujeres se palpan el pecho en busca de un posible cáncer de mama. Quizá los hombres deberían empezar a tocarse más los testículos. Lo recomienda uno de los portavoces de Movember, la campaña contra el cáncer de testículos y próstata que recauda dinero apadrinando bigotes en Noviembre.
Movember es la ONG que nos desvela datos tan alarmantes como que se detectan 25.000 casos de cáncer de próstata cada año sólo en España. De ellos, 6.000 acaban en fallecimiento. Casi uno de cada cuatro hombres mueren de cáncer de próstata por pasotismo o vergüenza masculina, por no palparse o visitar antes al urólogo.
Las campañas de publicidad bigotudas de Movember tratan de romper tabúes masculinos. Tras un cáncer de testículos sí se puede hacer el amor. Según los expertos en publicidad, las mujeres tienen mucho terreno ganado en cuestiones de salud.
Estos bigotes se extienden por todo el mundo en noviembre para visibilizar y normalizar problemas de salud masculinos. Bigotes que remueven conciencias para evitar problemas mayores.
En los bigotes de los más jóvenes está la responsabilidad de cambiar la actitud masculina frente a sus enfermedades. Ellos deben dar ejemplo, para que los más mayores también se tomen muy en serio su propia salud.