La Fiscalía pide seis años de prisión para el rapero Morad por atacar e intimidar con una defensa Taser a varios agentes de los Mossos d'Esquadra tras saltarse el confinamiento nocturno en julio de 2021 en L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona), en plena pandemia.

El cantante, al que se le ha abierto más de una causa judicial por otros hechos, se enfrenta ahora a una petición de pena de seis años de cárcel por los delitos de atentado agravado con uso de arma en concurso con un delito leve de lesiones -por el que el ministerio público solicita cuatro años de prisión- y por el delito de tenencia de arma prohibida -dos años-.

Además de esta petición de prisión, la Fiscalía solicita por un delito leve de lesiones ocasionado a unos de los agentes de los Mossos una multa de dos meses a razón de 10 euros de cuota diaria, así como una indemnización de 350 euros en concepto de responsabilidad civil.

De acuerdo con el escrito de acusación, que ha avanzado El Mundo y al cual ha tenido acceso EFE, el ministerio público sostiene que el 17 de julio de 2017 el rapero, con "manifiesta indiferencia a la autoridad", sacó un dispositivo eléctrico de defensa o Taser -considerado arma prohibida-, lo puso en funcionamiento y "lo empuñó contra los agentes de forma intimidatoria".

Acto seguido, prosigue la Fiscalía, el acusado "se abalanzó sobre ellos, intentando sobrepasarlos", y con el "ánimo de menoscabar la integridad física" de uno de los agentes de la policía, "le dio una patada en la pierna".

Ese 17 de julio, cuatro agentes de los Mossos d'Esquadra y otros dos de la Guardia Urbana se encontraban de noche realizando dispositivos de vigilancia para velar por el cumplimiento del confinamiento nocturno en los bloques de La Florida de L'Hospitalet de Llobregat.

Una vez finalizado el servicio, sobre las 02:20 horas de la madrugada, apreciaron cómo desde la ventana de uno de los bloques les tiraban botellas de cristal al tiempo que les gritaban: "Perros, hijos de puta". Un vecino alertó a los agentes del portal en el que se habían refugiado los posibles autores de los hechos, donde encontraron al rapero "huyendo por uno de los pasillos del rellano".

Tras identificarse, los agentes requirieron al acusado que dejara de correr, si bien este "hizo caso omiso", y al verse "acorralado sin salida en el final del pasillo" fue cuando sacó la defensa Taser y atacó a los policías, señala la Fiscalía en su escrito de acusación, dirigido al Juzgado de Instrucción número 3 de L'Hospitalet de Llobregat.

Finalmente los agentes consiguieron la reducción y detención del acusado, al cual se le intervino "dicha defensa extensible Marca ETS Pierre Supper, Modelo Stun/Gun Electro Max EM3, de 90 mm de largo, 36 mm de ancho y 22 mm de grosor de la que había hecho uso, que portaba sin tener la habilitación pertinente para su posesión".

La defensa de Morad niega, en cambio, que el rapero utilizara una defensa Taser, y asegura que había más personas implicadas en este incidente.