Un grupo de vecinos de la localidad de Corral de Almaguer, Toledo, han conseguido reducir a un joven que había realizado tocamientos a una mujer y agredido a otra tras volver de fiesta visiblemente borracho y drogado.

La primera mujer se encontraba limpiando un portal cuando el chico ha empezado a tocarle e insultarle. Intentando pedir auxilio, ha salido corriendo hasta su domicilio y ha logrado refugiarse en el ascensor, pero el agresor ha entrado con ella. Ahí han continuado los tocamientos y los forcejeos, hasta que la mujer ha conseguido entrar a su vivienda, donde ha pedido ayuda.

Ha sido entonces cuando el joven ha salido huyendo hacia el piso de arriba, donde ha comenzado a aporrear una puerta hasta que una vecina ha abierto. El agresor ha intentado entrar y, ante la negativa de la mujer, le ha atacado. "Cuando me he puesto en el marco de la puerta, me ha dicho que él entraba en mi casa porque era suya. Después, ha empezado a darme puñetazos y yo me he quitado la zapatilla y le he dado", ha declarado la víctima en 'Espejo Público'.

En ese momento, la mujer ha oído a su marido subir por las escaleras. "Le he dicho: 'Ramón, corre, date prisa'. Pero el chico le ha agarrado del cuello contra la pared y le ha pegado", ha explicado. Cuando ha conseguido escapar de las manos del joven, el hombre ha entrado al domicilio, donde ha llamado a la Guardia Civil. "Vino un cabo muy rápido, pero el chico lo infló a palos", ha afirmado la mujer.

Esta ha decidido llamar, entonces, a uno de sus hijos, que, con ayuda de los presentes, ha conseguido reducir al agresor. El joven, de 22 años, era un vecino de un portal colindante y, según sus antiguos compañeros de piso, tiene una orden de alejamiento.