La araña violinista puede llegar a medir hasta 20 milímetros, cambia de color según donde viva y se camufla para ocultarse de otros depredadores. Su nombre no es casual: las marcas que posee en el lado dorsal del tórax se asemejan a la forma de un violín.

Otra característica que permite identificarla son sus ojos: a diferencia de otros arácnidos, la araña violinista solo tiene seis ojos, dos menos de los habituales.

También conocida como 'araña de los rincones', su hábitat natural son lugares de clima cálido y seco como Sudamérica, de donde es originaria la especie, y suele encontrarse en grietas y rincones, sobre todo durante las noches más calurosas.

Se trata de una especie invasora, no natural de España. La única forma de que el arácnido haya llegado hasta la Península es transportada por un coleccionista o en un contenedor de mercancías; aunque aún se desconoce cómo ha llegado a la zona del Mediterráneo.

La picadura de la araña violinista es extremadamente peligrosa: su veneno es 15 veces más tóxico que el de una cobra, y 10 veces más que el ácido sulfúrico; devora los glóbulos rojos de su víctima, pudiendo llegar a causar muerte celular. Pero no es usual que ataquen: tan solo lo hacen cuando se sienten amenazadas, aunque, eso sí, es más fácil si un humano se toma con ella por error cuando merodea por alguno de sus escondites.

En caso de sufrir una picadura, lo más importante es acudir rápidamente al hospital. Mientras tanto, poner una bolsa de hielo sobre la picadura puede frenar la velocidad de reacción del veneno, así como mantenerse en reposo. Además, es importante mantener limpia la herida sin rascarse ni tocarse, ya que una infección puede complicar más el problema.

Los expertos descartan la alarma

Ejemplares de esta especie llevan décadas conviviendo con los humanos en la Península y los expertos aseguran que no hay motivos para la alarma porque no suele atacar.

No obstante, Francisco José Oliva, coordinador del proyecto Life Invasaqua apunta que "es un ejemplo más de esas especies exóticas invasoras que, por su gran repercusión social, pueden ser un estandarte de la información sobre los peligros para la salud que varias de estas especies invasoras".

A pesar de que en un principio salió a la luz que un hombre llevaba días ingresado en el hospital por una picadura de una araña violinista en Elda, desde el centro han emitido un comunicado diciendo que en las últimas semanas no han tenido constancia de ningún caso.

"Desde la Dirección de Salud Pública nos confirman que no se tiene constancia de ninguna alerta por picaduras de arañas, ni de plagas de las mismas en el momento actual", sostienen desde el centro.

En 2017, un vecino del barrio madrileño de Vallecas alertó a las autoridades de la aparición de una araña violinista en el baño de su vivienda. El ejemplar fue trasladado a 'Faunia', donde analizaron su origen.

En otros países, como es el caso de México, ya son numerosas las víctimas que se ha cobrado el arácnido. En el país centroamericano, un bebé tuvo que recibir numerosas transfusiones durante tres días hasta que su cuerpo no pudo sobrevivir al veneno. Aunque bien es cierto que cada humano tiene una tolerancia distinta ante su toxicidad.

A finales de junio de 2018, en una operación de los Mossos, los agentes intervinieron varios animales peligrosos entre los que había una araña violinista. Un joven de 23 años fue detenido por infracción administrativa por tenencia ilegal de especies peligrosas. Este tipo de conductas pueden conllevar una sanción de entre 401 y 2.000 euros.