La primera mujer transgénero registrada en Armenia ha recibido amenazas de muerte después de dar un discurso histórico en la Asamblea Nacional de su país, según publica 'The Guardian'.

Lilit Martirosyan se convirtió en la primera miembro de la comunidad LGBTI de su país en llegar al Parlamento, donde habló en contra de la discriminación del colectivo en una sesión sobre derechos humanos.

Martirosyan expresó su solidaridad contra una comunidad que, según afirmó, ha sido "torturada, violada, secuestrada, sometida a violencia física, quemada, inmolada, apuñalada, sometida a intento de asesinato, asesinada y robada". Asimismo, declaró que las personas transgénero en su país están sometidas "al estigma y la discriminación en las áreas social, médica, legal y económica".

El discurso de la activista ha provocado una reacción violenta en Armenia, donde la homosexualidad ha sido despenalizada, pero la discriminación contra las personas LGBTI es muy común. Además de protestas anti-LGBTI frente a la Asamblea Nacional, algunos parlamentarios han pedido que la quemen viva a Martirosyan.

"Fue la primera vez en Armenia que una mujer transgénero habló en el Parlamento de la violencia contra el colectivo", declaró Martirosyan a 'The Guardian', donde aseguró, además. haber sido amenazada por un "hombre transfóbico con un cuchillo" que fue a la Asamblea Nacional para decir que la mataría. "He recibido muchos mensajes a través de Facebook y correos electrónicos de varias personas que dicen que me encontrarán y me matarán", denunció en el mismo medio.

La oficina de la ONU en Armenia afirmó estar "preocupada por el reciente aumento del discurso de odio y las amenazas de violencia contra los derechos humanos y los activistas LGBTI". "No se pueden tolerar las amenazas de violencia ni ninguna forma de discriminación contra ningún grupo o individuo", declaró.

La UE se hizo eco de esas preocupaciones y dijo que "el discurso de odio, incluidas las amenazas de muerte dirigidas contra Lilit Martirosyan y la comunidad LGBTI en su conjunto, constituye una discriminación prohibida por la convención europea sobre derechos humanos y libertades fundamentales, de la que Armenia es parte".