La Unión Europea ha emitido una alerta sanitaria a través del Sistema de Alerta Rápida para Alimentos y Piensos de la Unión Europea (RASFF) tras detectar huevas de merluza contaminadas con anisakis en un control fronterizo en España. El producto, originario de Marruecos, ha sido retirado inmediatamente del mercado, aunque el organismo no descarta que otros lotes hayan eludido los controles.

El anisakis es un parásito que puede encontrarse en el pescado y los cefalópodos, provocando alteraciones digestivas y reacciones alérgicas que, en algunos casos, pueden ser graves. La Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aecosan) advierte que los síntomas pueden variar desde gastroenteritis hasta reacciones alérgicas serias, incluyendo el shock anafiláctico.

Según Aecosan, el riesgo de anisakiasis surge al consumir pescado crudo, poco hecho o marinado. Los síntomas de gastroenteritis incluyen dolor de estómago, vómitos y diarrea, mientras que las reacciones alérgicas pueden ir desde una leve urticaria hasta complicaciones graves.

Aunque la alerta está dirigida a las autoridades sanitarias y no a los ciudadanos, es importante que los consumidores tomen precauciones. Congelar el pescado que no será sometido a tratamiento térmico es una medida efectiva para evitar el riesgo de infección.

A pesar de la alerta, no hay razón para alarmarse excesivamente. En los últimos cuatro años, se han registrado 97 alertas por anisakis en la RASFF, la mayoría relacionadas con pescado procedente de Marruecos. La Agencia Catalana de Seguridad Alimentaria informa que un alto porcentaje de pescados del Atlántico y Cantábrico, así como del Mediterráneo, pueden contener el parásito.