En 2016, la familia del jugador -él y su padre Jorge Horacio Messi Pérez, fueron condenados en 2016 por la Audiencia Provincial de Barcelona por tres delitos fiscales por haber defraudado 4,2 millones de euros a Hacienda durante los ejercicios 2007, 2008 y 2009- aseguraron que esta sociedad estaba "totalmente inactiva" y que derivaba "de la antigua estructura societaria diseñada por las anteriores asesores fiscales" de la familia.
No obstante, según las nuevas filtraciones de los 'Papeles de Panamá' publicadas por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ), los Messi siguieron usando esta misma estructura societaria opaca en los ejercicios fiscales 2010 a 2013, hechos por los que no fueron juzgados al llegar a acuerdos administrativos con Hacienda.
Tras una nueva filtración desvelada en España por El Confidencial y laSexta, se ha conocido que la Unidad de Análisis Financiero para la prevención del blanqueo de capitales y el financiamiento del terrorismo (UAF) de Panamá emitió en febrero de 2017 un 'Reporte de operación sospechosa' (ROS) sobre Mega Star, que habría seguido funcionando tras la condena en España.
Los documentos también ponen de manifiesto que el despacho panameño renunció a seguir representando a Messi y retiró a los testaferros que había puesto para figurar como administradores de su sociedad. También recogen una respuesta de una trabajadora de Mossack Fonseca en la que señala que los Messi no cumplieron la obligación de proporcionar información sobre la sociedad.