El exmajor de los Mossos d'Esquadra ha entrado en la sala del Tribunal Supremo que juzga el juicio del 'procés' con una duda en el aire. "Sí, voy a responder a las preguntas", ha afirmado Josep Lluís Trapero al comienzo de su intervención.

En sus respuestas se ha referido al 1 de octubre como "el 1-O, el día del referéndum ilegal". Si bien fue el conseller Joaquim Forn quien aseguró que los Mossos garantizarían celebración, dichas declaraciones tenían para Trapero "un punto de irresponsabilidad".

En este sentido, ha negado que el dispositivo Ágora de los agentes catalanes previo a la celebración del referéndum fuera para facilitarlo. "No había ninguna intención de facilitar el referéndum. Impedirlo venía dado por las órdenes judiciales que recibimos", ha respondido el exmajor.

Sí ha reconocido que la designación de Diego Pérez de los Cobos como coordinador policial no le gustó. "No lo compartía, no pensaba que fuera la mejor solución", ha continuado Trapero. Sobre los sucesos que tuvieron lugar en la Consellería de Economía el 20 de septiembre, Trapero ha descrito una llamada del entonces conseller Forn.

"Le llamará el señor Jordi Sánchez para intentar ayudar, mediar", ha aseverado. Además, ha detallado el dispositivo policial de unos 20 agentes que se puso en marcha para que saliera la secretaria judicial. Ha precisado que su salida por la azotea del teatro fue por cuestiones de tiempo y no de seguridad.

"El motivo por el que se ofreció la otra salida no fue porque fuera inseguro el cordón", ha destacado Trapero. Y ha añadido que tuvo conocimiento "de lanzamiento de botella, algún empujón y, evidentemente, lo de los coches". Así se ha expresado Trapero en un importante día para el juicio del 'procés'.