Ambas partes han asumido el compromiso de actuar a partir de ahora con "plena lealtad y respeto mutuo", así como no realizar "manifestaciones sobre la otra parte, sin perjuicio de las opiniones que las partes pudieran mantener sobre cuestiones de interés público".
El acuerdo permite resolver las diferencias surgidas sobre la finalización de su relación laboral surgidas a raíz del cese de Pedro J. Ramírez como director de El Mundo a principios de este año.