Los dos fichajes de Santiago Abascal para dirigir Vox Barcelona han sido procesados por un presunto delito de incitación al odio por una campaña racista en las elecciones municipales de 2011, cuando formaban parte del partido xenófobo Plataforma per Catalunya, hoy ya disuelto.

Son Joan Garriga y Mónica Lora, nombrados por Abascal presidente y secretaria tesorera de Vox Barcelona a primeros de octubre. Tan solo 20 días después, a finales del pasado mes, un juzgado de Reus, en Tarragona, dictó auto de apertura de juicio oral contra ellos y otros 11 antiguos miembros de la cúpula de dicho partido por un delito de discriminación y provocación al odio, castigado con penas de hasta cuatro años de cárcel y 12 meses de multa.

Repartian cheques simulados de 4.000 euros a nombre de un supuesto musulmán para decir que era lo que recibían los migrantes de ayudas públicas.

Los hechos por los que tendrán que sentarse en el banquillo, según el auto al que ha tenido acceso laSexta, se remontan a las elecciones municipales de 2011, cuando realizaron una agresiva campaña bajo el lema “Primer els de casa” (primero los de casa) que incluía un cheque simulado de 4.000 euros a nombre de un supuesto musulmán y acusaba a los inmigrantes de acaparar puestos de trabajo, recibir subvenciones, no pagar impuestos o tener vínculos con las mafias.

Desde la formación de extrema derecha se escudan en que Garriga y Lora no formaban parte de la Ejecutiva de Plataforma per Catalunya. Fuentes de Vox consultadas por laSexta indican que Lora fue voluntariamente al juzgado para entregar documentación que certifica -dicen- que solo era exconcejal del Ayuntamiento de Mataró. Garriga, por su parte, no ha tenido que ir, afirman.

La entidad denunciante es la Asociacion Ciudadanos por la Convivencia y el Desarrollo 'WATANI', la misma que ya denunció a Javier Ortega Smith por sus palabras sobre la "invasión islamista".

Desde Musulmanes contra la Islamofobia, Ibrahim Miguel Ángel Pérez, en conversación con laSexta, ha acusado a Vox de ser un partido "abiertamente racista que incorpora a personas con esas características (...) Vox promueve odio. Más que fascista es un partido neoliberal que promueve una España identitaria".

Asegura que hay sentencias "a nivel europeo de políticos que dicen que hay que expulsar a inmigrantes y fomentar a nacionales". Sobre los dirigentes de Vox procesados, asegura que Garriga "formaba parte por de un movimiento de extrema derecha neofascista y Mònica Lora forma parte de agrupaciones del Maresme". Sobre ella dice que "solicitaba la expulsión de inmigrantes porque dice que constituimos un peligro para la democracia. Es normal que estas personas formen parte del mismo corte y se incorporen a ese partido".