Rajoy ha atendido unos momentos a los periodistas a su llegada al hotel de Barcelona, un día después de haber sufrido un puñetazo por parte de un joven en Pontevedra. "Me encuentro muy bien, muchas gracias. Ya ha pasado", ha señalado el jefe del Ejecutivo, quien ha recordado que tras este foro viajará a Bruselas para participar en la reunión del Consejo Europeo.

"Y si Dios quiere cerraré campaña en Valencia y en Madrid mañana", ha añadido. A la pregunta de si le dolió mucho la agresión ha asegurado que no, y ha insistido en que está bien, además de relatar que fue "todo de repente y muy rápido" e insistir en que "ya pasó".

"Y no hay que darle más importancia que la que tiene, somos un pueblo tranquilo y moderado y esto es la excepción que confirma la regla", ha señalado Rajoy, quien ha vuelto a insistir en que "no hay ninguna consecuencia política" de este incidente.

El presidente del Gobierno ha asegurado que seguirá dando paseos como ha venido haciendo en campaña y precampaña: "sí, sí, no tenemos por qué cambiar en absoluto nuestra forma de hacer campaña porque haya una excepción que confirme la regla general del civismo", ha subrayado.

Y a la pregunta de si ahora tiene miedo a los selfis, Rajoy se ha reído y ha contestado: "no, no, qué va". Ha recordado además que ha recibido en las últimas horas "muchísimas" llamadas de solidaridad y que no ha tenido tiempo de contestar a todas, algo que piensa hacer en los próximos días.