Sánchez, en declaraciones a Onda Cero, ha respaldado firmemente la decisión de la presidenta en funciones de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, de paralizar la concesión después de que una jueza haya alertado de posibles irregularidades y de falta de rigor en el proceso.

"El PSOE es incompatible con la corrupción y ante la más mínima duda, se paraliza, se ponen luz, taquígrafos y focos y que se llegue hasta la última de las consecuencias", ha sostenido el líder del PSOE.

Al asegurar que se trata de un asunto de "suficiente entidad", ha insistido en que tiene que aclararse "hasta el último detalle" para que la jueza investigue el caso y las posibles infracciones a partir de la documentación que está aportando la Junta.

Según Sánchez, "el simple hecho" de que la Junta haya paralizado la adjudicación "demuestra que está en llegar hasta el último punto para que se esclarezca con la máxima transparencia".

"En lo que estamos es en que el PSOE es incompatible con la corrupción y con cualquier tipo de trato de favor", ha hecho hincapié el secretario general. Ha apuntado que la dirección federal de su partido está "en permanente contacto" con el PSOE andaluz para conocer la evolución del asunto.

Al margen de lo que determine la jueza, Sánchez ha recordado que la asunción de responsabilidades políticas está fijada en el código ético del partido, que estipula que un cargo público deberá dejar su puesto si se le imputa un delito grave y se le abre juicio oral.