Mariano Rajoy se ha echado a la carretera. Inauguración en la Rioja a primera hora y más tarde parada en un hospital reformado en Santander.
Inaugurar siempre vende, pero en precampaña el PP tendrá que buscar otros activos. Es lo que pide Fabra cuando pide explicar lo que están haciendo. "Creo que tenemos que hacer una labor pedagógica importante, todos".
A falta de autocrítica por parte de la dirección nacional, hay quien ahora reconoce que los populares en eso de comunicar no lo han hecho muy bien. "Parece que no por lo que dicen las encuestas, que no quiere decir que eso sea exacto", pero parece que no hemos sabido poner de manifiesto la salida de la crisis", afirma Ana Botella.
Un mesaje que no acaba de calar en Génova. "Bueno ahora tenemos ocho semanas por delante y tenemos que afrontar la campaña de municipales y autonómicas", explica Floriano.
¿Y cómo hacerlo? Los candidatos dosificarán la presencia de su jefe de filas. El objetivo es vender menos la marca PP y más gestión personal y estilo propio. Madrid es el paradigma con Esperanza Aguirre pregonando sus exámenes de honradez o sus particulares arranques de sinceridad o con Cristina Cifuentes presumiendo de estilo y multiplicando su presencia en platós.
Otros se alejan más de lo focos, como María Dolores de Cospedal cuando tocaba explicar el fracaso electoral en las elecciones andaluzas. Y es que ahora el partido se juega en casa y la estregia de fiarlo todo a la recuperación económica.