Bombardean con insultos a la diputada británica en contra del Brexit Anna Soubry. Lo hacen en mitad de una entrevista gritándole: "¡Soubry es una nazi!".

Ella no se deja intimidar. "Me opongo a que me llamen nazi. Lo siento, es que esto me parece alucinante, es lo que le ha pasado a nuestro país".

También la abordan por la calle, la rodean con sus móviles y la persiguen hasta las puertas del Parlamento al frito de "¡Anna, eres una fascista!".

A pocos metros, unos agentes. La diputada protesta. "Allí hay dos policías parados", y denuncia la inacción.

Pero Soubry cuenta con apoyo entre la clase política birtánica. Más de 50 políticos han pedido ya a la policía de Londres que actúe ante el acoso que llevan a cabo, aseguran, individuos de extrema derecha.

Petición que llega también desde Westminster, donde John Bercow, Presidente de la Cámara de los Comunes británica asegura estar preocupado "por lo que parece un patrón de protestas dirigidas, en particular, hacia a las mujeres".

Con un Brexit que todavía no ha votado el Parlamento, la tensión se nota más que nunca en la calle.