El despido del hasta ahora fiscal general, Jeff Sessions, y el nombramiento provisional en su lugar de Matthew Whitaker, crítico con Mueller y la investigación, ha hecho temer que el Departamento de Justicia cumpla finalmente con el deseo de Trump de cerrarla.

En Washington cientos de personas protestaron con velas en el parque de Lafayyete, frente a la Casa Blanca, al grito de "nadie está por encima de la ley", "Whitaker debe inhibirse" o "cuando luchamos ganados".

Los manifestantes tenían un altavoz tan potente que estas consignas se oían desde el ala oeste de la Casa Blanca. En uno de los carteles de la marcha ponía "tre45son", un juego de palabras entre "treason" (traición en inglés) y el número 45 en alusión a la presidencia de Trump.

Una de las marchas más numerosas del país fue en Nueva York, donde centenares de personas se agruparon en Times Square.

El llamado nacional de varias plataformas y organizaciones también tuvo eco en Oakland (California), Boston (Massachusetts), Chicago (Illinois), Charlottsville (Virginia), Chattanooga (Tennessee), Louisville (Kentucky) u Orlando (Florida) entre muchas otras urbes.

Trump despidió a Sessions tras meses de tensión. El presidente nunca le perdonó que se apartara de todo lo relacionado con la investigación de la trama rusa debido a sus contactos con Moscú durante la campaña electoral a la presidencia.