A partir de este testimonio, y con la ayuda de equipos técnicos como drones y georradares, el 8 de agosto los expertos lograron concretar un área de unos 300 metros cuadrados donde, después de casi un mes de trabajo, "se han localizado los restos de al menos 166 personas".

"Después de 30 días de trabajo se han hallado los restos de 166 personas, ese es el número mínimo de individuos que han podido ser identificados en base a los cráneos encontrados en 32 partes del área de búsqueda", ha manifestado el Ministerio Público en un comunicado.

El fiscal general de Veracruz, Jorge Wincler Ortiz, ha confirmado también la localización de más de 200 prendas de ropa, 114 identificaciones y diversos enseres personales. "Del análisis antropológico de los hallazgos, ha sido posible determinar que se tratan de inhumaciones clandestinas de al menos dos años de antigüedad", ha asegurado.

Las labores de investigación se habían desarrollado en secreto "para garantizar el éxito", pero el fiscal ha prometido actuar a partir de ahora "con total transparencia", también hacia los colectivos de familias de personas desaparecidas. Así, se pondrá a disposición de las familias un catálogo de fotografías de enseres y documentación por si pueden identificar algún resto.

En este sentido, Winckler ha instado a los residentes de Veracruz cuyos familiares han desaparecido a acudir ante las autoridades para ser sometidos a varias recogidas de muestras de AND en un intento por identificar los restos. En marzo de 2017, el fiscal general del estado mexicano anuncio el hallazgo de 250 cráneos en diversas fosas.

Según el Registro Nacional de Datos de Personas Extraviadas o Desaparecidas (RNPED), en México hay más de 36.000 desapariciones denunciadas y pendientes de resolución. La cifra más alta de desapariciones se remonta a 1997, cuando los diferentes cárteles del país se dividieron en grupos más pequeños en el marco de una campaña militar para acabar con ellos.

Veracruz se ha visto afectado por el crimen y la violencia durante años y es una de las rutas más importantes del narcotráfico. La violencia aumentó considerablemente bajo el mandato del gobernador Javier Duarte, del Partido Revolucionario Institucional (PRI) de Enrique Peña Nieto, hasta 2016.

Dutarte se encuentra en prisión a la espera de ser juzgado por su presunta participación en el crimen organizado y desvío de fondos públicos. El exgobernador ha negado las acusaciones en su contra.