El piloto ha tenido que aterrizar de emergencia en Heathrow. La policía ha registrado el avión y tras el susto, el colapso de las pistas ha causado la cancelación de 178 vuelos.

Mientras la policía londinense investiga a fondo el pasado de los dos asesinos islamistas del soldado degollado. El odio islamista ya había calado hondo en Michel Adebolajo en 2007, cuando participaba en una manifestación radical. Las autoridades tenían fichado a Michael, aunque eso no impidió que cometiera el salvaje asesinato de Woolwich junto a su compinche, Michael AdebowaleUn brutal atentado que el posible tutor de Adebolajo no ha querido condenar.

El clérigo Anjem Choudary, el que fuera líder de Al Mujayirún, una asociación islamista ilegalizada hace meses, cree que la política exterior británica fue la causa que les empujó a matar al soldado Rigby.

Los medios británicos han difundido por primera vez imágenes del tiroteo entre la policía y los asesinos de Woolwich. Un largo intercambio de balas que terminó con los presuntos terroristas abatidos. Ambos permanecen hospitalizados y sus vidas están fuera de peligro. Quienes les conocían todavía siguen perplejos.

Mientras, se suceden los homenajes al soldado Rigby. Su familia le define como generoso y carismático. Al igual que el coronel que le instruyó. La brigada antiterrorista de Scotland Yard trabaja a destajo para atrapar a todos los responsables del atentado de Woolwich. Han detenido a un hombre y una chica acusados de conspiración. Investigan la posible relación de la mujer con los Michaels, los asesinos de Woolwich.