La tensión no cesa en los Estados Unidos a la espera de conocerse el ganador de las elecciones presidenciales. El resultado, de momento, es muy ajustado y se han vuelto a producir incidentes.
Uno de ellos ha sido en Filadelfia (Pensilvania) donde la policía ha frustrado un supuesto plan para atacar el Centro de Convenciones de Pensilvania, donde se lleva a cabo el escrutinio de votos en esa ciudad, informó la filial de la cadena ABC en la zona.
La Policía recibió un aviso sobre un grupo de personas, originarias del estado de Virginia, que se habría trasladado en un vehículo todoterreno a Pensilvania para lanzar el ataque. Por el momento, hay un hombre detenido, pero se desconoce si está relacionado con la investigación y en qué sentido.
Esto se produce mientras continúa el cómputo de los votos de las elecciones presidenciales del pasado martes en Pensilvania y en otros estados clave como Georgia, Carolina del Norte, Arizona y Nevada.
Con el 94% de los votos contabilizados en Pensilvania, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, va por delante con el 49,5% de los sufragios frente a su rival demócrata, Joe Bien, que ha obtenido el 49,2%.
Por otra parte, la policía de Nueva York arrestó a varias personas en una nueva manifestación en la que unas 200 personas, convocadas por el movimiento de Black Lives Matter y la comunidad transexual afroamericana, recorrieron las calles de Manhattan mostrando su rechazo al supremacismo blanco al grito de "you can't stop the revolution" (no podéis parar la revolución).
La marcha, que comenzó frente al icónico bar de Stone Wall, donde se produjeron las protestas que espolearon el movimiento LGTB en 1969, estaba inicialmente flanqueada por decenas de policías que se desplazaban en bici y en moto, vehículos con los que rodearon a los manifestantes y comenzaron a practicar detenciones una hora después de iniciarse la manifestación.
Entre los manifestantes, que portaban la bandera multicolor que representa la comunidad LGTB, se oían gritos de "fuck you president" (que te jodan, presidente), en referencia a Donald Trump, y "facist system" (sistema fascista).
Tras un discurso, y con una mayor presencia de las fuerzas de seguridad en Union Square, la mayor parte de los manifestantes se dispersaron, pero la policía se enfrentó en varias ocasiones a medio centenar de personas que permanecieron en la plaza, y que comenzaron a ocupar las calzadas.
Por su parte, la Policía de Nueva York informó en las redes sociales tras la manifestación de que uno de los agentes fue atacado por una de las personas que participaba en la protesta.
"Un agente fue empujado al suelo y presionaron una cadena sobre su cuello. El sospechoso fue arrestado y será acusado de asalto, posesión criminal de un arma e intento de estrangulamiento", reza una publicación de Twitter de la NYPD, que añadió que "cualquier forma de violencia es inaceptable".