Sessions ha pedido a
Wray que obligue a renunciar a su "número dos", Andrew McCabe, quien
ha sido objeto de numerosas críticas por parte del presidente estadounidense,
el republicano Donald Trump.
En concreto, CNN afirma
que Sessions sugirió a Wray, en el cargo desde agosto de 2017, que necesitaba
un "nuevo comienzo" con los altos rangos del FBI y, al hilo de eso,
sugirió que era necesario despedir a McCabe, quien era la mano derecha de James
Comey, anterior director del FBI despedido por Trump.
En respuesta a Sessions,
Wray amenazó con dimitir si McCabe es despedido o reasignado a otro puesto
diferente. Trump eligió a Wray para dirigir la policía federal después de
destituir de manera fulminante al entonces director del FBI, James Comey, quien
lideraba la investigación sobre los posibles lazos entre Rusia y miembros de la
campaña del magnate para facilitar su triunfo en las elecciones de 2016.
En los últimos meses,
Trump ha atacado duramente al FBI y ha afirmado que cuenta "con la peor reputación
de su historia". El mandatario también ha arremetido en varias ocasiones
en Twitter contra McCabe por las donaciones que su esposa, Jill McCabe, recibió
cuando compitió en 2015 por un escaño en el Senado del estado de Virginia.
En ese momento, Jill
McCabe recibió 675.288 dólares de dos entidades asociadas con el gobernador de
Virginia, el demócrata Terry McAuliffe, quien ha sido descrito como "el
mejor amigo" del expresidente Bill Clinton y, por tanto, una persona
cercana a Hillary Clinton, rival de Trump en las elecciones de 2016.
Mientras Jill McCabe se
presentaba a las elecciones de Virginia, su marido participaba en la
investigación que el FBI abrió a Clinton por el uso indebido que hizo de
servidores de correo privados para tratar asuntos de interés nacional cuando
era secretaria de Estado (2009-2013). Al ser preguntado por Efe, un portavoz
del FBI rechazó hoy comentar sobre los reportes de prensa.