A raíz de la crisis de los rehenes en Argelia, Cameron canceló el esperado discurso que iba a pronunciar hoy en Amsterdam sobre la relación del Reino Unido con la UE y la posible propuesta de un referéndum sobre la pertenencia de este país a la Unión Europea.

No obstante, Downing Street, la residencia oficial del jefe del Gobierno, ha divulgado algunos extractos de su intervención, en la que Cameron quería dejar claro que busca cambios en la UE a fin de responder a la crisis en la eurozona, la competitividad económica y la fuerte caída del apoyo de la población en el bloque europeo.

Las notas facilitadas por el Gobierno no revelan si el primer ministro tenía intención de comprometerse a convocar un referéndum sobre la permanencia británica en la Unión. Aunque Cameron está a favor de que el Reino Unido permanezca en la Unión, es partidario de que lo haga más bien como socio comercial por las ventajas del mercado único.

Según extractos del texto, el primer ministro iba a decirle a los líderes europeos que tienen el "deber" de responder a la creciente frustración de la población y de aceptar cambios que ve necesarios sobre la forma en que debe funcionar la UE. De no ser así, según el "premier", los países europeos afrontan "menos competitividad, menos crecimiento, menos empleos".

Pese a todo, Cameron iba a dejar claro que el Reino Unido quiere tener una labor "activa" en la UE. Europa "debe cambiar para crear prosperidad y retener el apoyo de sus pueblos", según parte del discurso.

"Si no atendemos estos desafíos, el peligro es que Europa fracasará y el pueblo británico se desplazará hacia la salida. Yo no quiero que eso pase. Yo quiero que la UE sea un éxito y quiero una relación entre el Reino Unido y la UE que nos mantenga", agrega.

Según iba a explicar ante diplomáticos y empresarios de la UE, la población siente una gran frustración porque su calidad de vida se ve afectada por la aplicación de medidas de austeridad o porque sus impuestos son utilizados para rescatar otros gobiernos.

"Y si, por supuesto, estamos viendo mucho esta frustración con la UE en el Reino Unido. Los líderes europeos tienen el deber de escuchar estas preocupaciones. Y nosotros tenemos el deber de actuar", indican los extractos.

"Si hay más de lo mismo, habrá más de lo mismo, menos competitividad, menos crecimiento, menos empleos. Y eso hará a nuestros países más débiles, no más fuertes", agrega Cameron.

El político había elegido un país fundador del proyecto europeo para explicar su estrategia, vista como muy arriesgada por los europeístas, pero destinada a contentar a la poderosa ala euroescéptica de su partido, el Conservador, que ve demasiada interferencia de Bruselas y prefiere salir de la UE.

El 40% de las exportaciones británicas van a países comunitarios, pero la crisis en la eurozona ha mermado los ingresos del Reino Unido y ha causado el recelo entre los británicos.

El Reino Unido salió de la recesión en la que estaba sumido en el tercer trimestre de 2012 después de haber acumulado tres trimestres consecutivos de contracción económica. Según las últimas encuestas, un 42% de los británicos están a favor de salir de la UE mientras los partidos políticos europeístas insisten en los riesgos económicos.