El presidente de la CEOE, Juan Rosell, ha asegurado que los empresarios siempre están "con los políticos que mandan porque son los que pueden hacer cosas", pero ha precisado que "hay que tratar de convencerles de que, aunque sea a costa de votos, hagan lo que es bueno para las empresas, porque será bueno para la economía en su conjunto". "Muchas veces les pedimos lo que no pueden hacer", ha apuntado.
Durante su participación en el Foro Económico del Norte de Castilla, el patrón de patronos ha dicho que son los políticos en el poder "los únicos a los que se les puede decir que se ha de ir por una dirección, y los únicos que se van a quemar en el empeño".
Según Rosell, esta forma de enfocar la relación con los Gobiernos es un signo de independencia política que debe caracterizar a la CEOE, así como la independencia económica.
En este sentido, dentro de su apuesta por modernizar la Confederación en línea con otras patronales europeas, para adaptarla a los tiempos, Rosell ha dicho que "cuanto menos dinero llegue a la patronal de la Administración mejor, aunque eso obligue a tener estructuras más livianas".
Por último, el presidente de la CEOE ha apostado por que se lleve un control "absolutamente público" de lo que se hace en la organización. "Como somos la organización de las empresas, los códigos de gobernanza deben estar al máximo nivel y si algunas veces nos pasamos, mucho mejor", ha dicho para lamentar la "relajación" vivida en este sentido en el seno de la CEOE durante los últimos años bajo el mando de Gerardo Díaz Ferrán.