Las llamadas para ofrecernos promociones y ofertas comerciales se repiten tantas veces que, en algunos casos, llega a convertirse en acoso. Este tipo de ofertas telefónicas es una de las prácticas comerciales que más malestar ciudadano genera. Pero la indefensión del cliente sigue siendo la misma.

El Gobierno propone acabar con esas llamadas. "Un sistema para que en la misma llamada de la oferta se puedan rechazar más llamadas", ha anunciado la ministra Ana Mato. Esa regulación ya existe, pero no se cumple por parte de las empresas. Desde el ministerio añaden el matiz de que se haga una grabación con la petición de rechazo.