El Gobierno quiere mediar, pero sin el apoyo del PSOE se resiste a concretar qué hará con las cláusulas suelo. "Es voluntad tanto de las entidades financieras como de las personas o de los abogados que las puedan asesorar, pero el Gobierno va a intentar que haya un entendimiento sobre este tema", explica Mariano Rajoy.
La idea de Moncloa es esquivar los tribunales abriendo una negociación entre cliente y entidad para que se devuelva el dinero o se amortice la hipoteca. El problema es que el Ejecutivo no quiere obligar a los bancos a adherirse a ese código de buenas prácticas y los socialistas exigen que esa firma sea obligatoria.
Según Pedro Saura, portavoz de Economía del PSOE en el Congreso, "es un planteamiento de desequilibrio hacia los bancos, cuando ya hay una sentencia que deja clara las cosas claras en favor de los consumidores".
Una sentencia, la del Tribunal de Justicia Europeo, que quita la razón al Supremo y dicta que las entidades devuelvan el dinero más allá de 2013.
A la espera, están afectados como Mari Carmen, que lleva pagando 500 euros de más al mes por su hipoteca. Recurrió a la vía judicial en 2010 y a la espera de una respuesta, rechaza cualquier código voluntario. "Es como darle la potestad al lobo de elegir a que oveja salva o no se come. No me da mucha confianza", considera la afectada.
Para las asociaciones de consumidores supone alargar plazos y recuerdan que los juzgados ya están obedeciendo al tribunal europeo. "Eso es lo que arriesgan las entidades financieras, pero saben que muchos consumidores no van a ir a juicio y están beneficiándose de esa falta de presión", asegura Rubén Sánchez, portavoz de FACUA.
Por su parte, el sector bancario prefiere no pronunciarse hasta conocer el código en detalle.