La batalla por Deoleo, la española líder mundial del aceite de oliva, la ha ganado al final un fondo de inversión inglés. Por tanto, se elimina el riesgo de que quedase en manos italianas, pero más que las banderas, lo que ha importado el poder financiero. El Gobierno estudia comprar una parte para formar un bloque de accionistas españoles, ante el riesgo de que en el futuro los británicos puedan vender.