Rafa Nadal sigue con paso firme en Wimbledon y, tras eliminar a Taylor Fritz, se enfrentará en semifinales contra el australiano Nick Kyrgios. Sin embargo, al inicio del torneo británico, se pudo observar cómo Nadal llevaba un aparatoso vendaje en el abdomen debido a una lesión que a punto estuvo de hacer que se retirara en cuartos de final.
El tenista de Manacor ha sido muy discreto respecto a su salud, evitando hablar en todo momento de esta nueva lesión.
La hierba de Wimbledon es una superficie que requiere mucha exigencia y es por ello que Nadal tuvo que recurrir a este vendaje conocido como kinesioterapia, un tipo de vendaje que ayuda a liberar los músculos.
Pero no fue hasta este miércoles al acabar el partido con Fritz que el balear se pronunció por primera vez. ''Está claro que algo no va bien en los abdominales. Pensé que no podría terminar, pero busqué la manera de cambiar mi saque y todo fue mejor'', explicó.
Nadal luchará por un puesto en la final contra el polémico Kyrgios, uno de los tenistas más complicados en hierba, aunque el español no ha asegurado su presencia en el partido que se jugará este viernes.
''Lo primero es ver si podré estar listo para jugar. Nick es un gran tenista, uno de los más complicados en hierba. Intentaré estar al 100% para tener opciones''.
No es la primera lesión abdominal de Nadal
En el año 2009, durante el US Open, Nadal sufrió una rotura y necesitó ser atendido por los fisios, que le colocaron el mismo vendaje en el abdomen. Además, es la cuarta vez durante su carrera que sufre de dolor abdominal.
A pesar de ello, Nadal tratará de ponerse a punto para intentar lograr el que sería su Grand Slam número 23.