Con el Abierto de Australia y Roland Garros en su vitrina, Rafa Nadal va a por los cuatro grandes esta temporada... y el presente objetivo es Wimbledon.
El manacorí ya se encuentra en cuartos de final del torneo británico tras someterse a un novedoso tratamiento de infiltraciones después de ganar en París para sofocar el dolor perenne que sufre en su pie izquierdo.
En Wimbledon, Nadal ha ido de menos a más, pero él mismo es consciente de que aún le queda para ser realmente competitivo en las rondas finales.
"Las mejoras durante el torneo están ahí y estoy contento de volver a cuartos tres años después. Si no puedo aumentar el nivel lo normal es que me vaya para casa", señaló en rueda de prensa tras vencer a Van de Zandschulp.
En cuartos espera Fritz, verdugo de Rafa en Indian Wells, aunque para el balear se trata de un partido diferente: "No aprendí nada porque tenía una fisura en la costilla y el dolor era muy fuerte. Es obvio que está jugando a un gran nivel porque ha ganado torneos en todos lados".
Sus molestias ya han aminorado, pero sí le han obligado a 'reciclarse': "Es obvio que corro menos que antes. Cando pierdes cosas tienes que añadir otras para ser competitivo. Es lo que tienes que hacer cuando pierdes capacidades físicas".
Por último, Rafa Nadal se negó a hablar de los vendajes que cubren la parte derecha de sus abdominales: "Estoy un poco cansado de hablar de mi cuerpo y prefiero no hablar de eso ahora en mitad del torneo. Estoy lo suficientemente bien".