Andrea Jaeger, quien fue niña prodigio del tenis, ha desvelado en una entrevista en 'The Independent' que, durante su carrera como tenista, la acosaron sexualmente "al menos 30 veces" en el vestuario.

La jugadora, doble finalista de Grand Slam y ganadora de 10 títulos, tiene ahora 57 años. A los 19 se tuvo que retirar a causa de una lesión de hombro, pero antes, a los 15, ya había debutado en Wimbledon. En 1983 jugó y perdió ante Navratilova en la hierba británica, y en 1982, ante la misma rival, cedió en la final de Roland Garros.

Ahora, en la entrevista, la jugadora que se hizo un icono por su imagen, con cinta y dos largas coletas, ha reconocido haber sido víctima de acoso.

"Tuve al menos 30 incidentes con una persona. Intentos físicos, todos en el vestuario. Muy pronto. Muy temprano en mi carrera", afirma.

Y sigue: "Esa empleada del personal tenía problemas para tener quietas sus manos".

"Evitaba también quedarme sola en las salas de entrenamiento. Allí también se me acercaba", cuenta Jaeger en el citado medio.

La tenista cuenta más episodios, como cuando en 1982, en el Campeonato de la WTA, comenzó a sentirse mala: "Una oficial me acompañó a mi casa. Al llegar me acompañó a la puerta y trató de besarme".

"Estaba tan mal que subí las escaleras de casa intentando no vomitar. No quería que mi padre me viera", cuenta.

Jaeger afirma que incluso sufrió presiones y amenazas para que no dijera nada: "Me dijeron que si decía algo retirarían la beca a mi hermana para ir a Stanford. Siempre que quería defenderme me amenazaban con que le harían daño a otra persona".

"No quiero permitir que otros sufran más daño. Ahora, 40 años después, si un niño se enfrenta a cosas similares puede quedarse callado si se siente amenazado", sentencia.