Spielberg suele decir que él hizo que la bicicleta se levantara, pero que John Williams fue el que la hizo volar.

Un diseño del personaje en el que supo darle intriga, ocultándonos el rostro del extraterrestre durante la primera media hora de película, pero al final consiguió empatizar con el espectador.

El personaje de ET, que podría ser un personaje muy arriesgado, podría haber sido algo desastroso, pero sin embargo Spielberg es capaz de darle alma y hacer que en todo momento parezca un ser vivo.

El protagonista de la historia tiene que ver mucho con la vida de Spielberg: el hijo tímido de unos padres separados. Y para interpretarlo dio con él.

Henry Thomas lo hizo tan bien en el casting que Spielberg no tuvo dudas. Le dio el papel nada más terminar la audición.

En su día fue la película más taquillera de la historia. Un honor que mantuvo más de diez años. Y eso que 'E.T. el Extraterrestre' es una película muy pequeñita, probablemente la más pequeña de Spielberg, con poco presupuesto y pocos actores. Sólo con eso es capaz de hacer magia, una magia que nos ha hecho volar y emocionarnos durante todos estos años.