Laura tenía tan sólo 15 años cuando empezaron los primeros síntomas. "Un hormigueo que no me dejaba andar bien, ni moverme bien, pero no sabía lo que era. Empezaron a hacerme pruebas y fue cuando me dijeron que tenía esclerosis múltiple", relata.

Tuvo que empezar a vivir una vida marcada por inyecciones diarias y por el miedo a una nueva recaída. A los 25 años, ocurrió, "tuve un brote que se me quedó todo el lado derecho como si me hubiera dado un ictus. Fue un choque muy grande", recuerda.

Ahora tiene 29 años y, como ella, más de dos millones de personas en el mundo tienen esclerosis múltiple. En España son 50.000 y afecta tres veces más a mujeres que a hombres. "Tienen que hacer frente a importantes retos como son sñintomas muy diversos, pérdudas de funcionalidad, tratamientos o visitas frecuentes al hospital", explica l apsicóloga Cristina Soria.

La esclerosis múltiple todavía no tiene cura, pero, ahora, un nuevo fármaco en España busca ayudar a normalizar la vida de los pacientes. "Con un máximo de 20 días durante dos años vamos a controlar la enfermedad durante cuatro", indica la jefa de Neurología Celia Oreja.

El medicamento actúa directamente en los linfocitos que provocan la esclerosis. Los elimina y, según los médicos, reeduca el sistema inmune creando unos nuevos. "No van a tener tan presente la enfermedad, ni a tomar medicamentos que les recuerde a diario que están enfermos", señala Soria.