Marco Wittmann, como un tiro en el DTM

Con sólo dos citas por delante, la gran pregunta en el DTM 2016 es quién puede parar a Marco Wittmann. El campeón de 2014 está haciendo una temporada sencillamente extraordinaria y en Nürburgring rayó a un nivel inalcanzable, no bajándose del podio en todo el fin de semana. Con ello logró una ventaja al frente de la general superior a una victoria, con sólo cuatro carrera aún por disputarse. El sábado aprovechó que Lucas Auer no pudo disfrutar de su pole al arrastrar una sanción previa y lideró de principio a fin para anotarse el triunfo, mientras que en la jornada del domingo se situó segundo en parrilla tras el austriaco y terminó subiendo al tercer escalón del podio. En definitiva: 33 puntos de renta con 100 aún en juego.

Su más inmediato perseguidor es ahora Edoardo Mortara, principal baza de Audi después de que la marca de los cuatro aros recuperara algo de competitividad en sus RS5 este fin de semana. Él y Green lucharon en puestos cabeceros durante las dos carreras. En la primera se intercambiaron posiciones para tratar de aprovechar el ritmo del italiano, pero éste terminó devolviéndole el tercer puesto al británico, tras Tom Blomqvist. En la segunda, con parada en boxes obligatoria, buena parte de los Audi decidieron imitar la estrategia que tan bien le ha salido durante todo el año a Mattias Ekström y Nico Müller: retrasar sus paradas para así rodar con pista libre. Y el italiano no falló, saliendo de boxes segundo y adelantando por la victoria a Lucas Auer. En cambio Jamie Green se topó con Gary Paffett al salir de boxes y ahí se esfumaron sus opciones en carrera y en la general.

Aunque los mejores resultados del fin de semana para Mercedes los firmó Lucas Auer, en la jornada del sábado quien dio auténticos dolores de cabeza a Mortara y Green fue Dani Juncadella. Como ya ocurrió , el catalán complicó enormemente la vida a los Audi ante la debilidad de quienes deberían ser los jefes de fila de la marca de la estrella: dos puntos para Wickens en Nürburgring, ocho para Di Resta. Pero una vez más su esfuerzo no se vio recompensado: Bruno Spengler se lo llevó por delante, acabando así fuera de los puntos. Al menos Juncadella sí logró ver la bandera a cuadros con puntos en el bolsillo durante la segunda carrera, que acabó noveno. Tras él cruzó meta Miguel Molina después de una carrera repleta de incidentes, pero uno de ellos, un encontronazo con António Felix da Costa, motivó que fuera sancionado con posterioridad, perdiendo así el décimo puesto. La próxima cita del DTM se disputará en Hungaroring el primer fin de semana de octubre.