"Totalmente imposible". Así sentencian desde el PSOE la idea, deslizada por Vox, de que "un puñado" de diputados socialistas facilite una investidura de Alberto Núñez Feijóo. Una posibilidad que el ministro de la Presidencia en funciones, Félix Bolaños, ha descartado de plano este miércoles, cuando ha aventurado que "el PP para esconder su fracaso está entreteniéndose en fingir que el señor Feijóo puede detener una investidura" de Pedro Sánchez.

Bolaños se ha pronunciado así tras la reunión de la Diputación Permanente del Congreso y ha celebrado en cambio que el líder del PP "ahora diga que el PSOE es un partido de Estado" tras "todos los insultos y todas las falsedades" vertidas contra los socialistas. Ello, después de que Feijóo apelara la víspera a la segunda fuerza política tras el portazo del PNV, aduciendo que sería "un inmenso error" que "gobernasen los independentistas", frente a unos "partidos de Estado" que "han ganado en apoyos".

El número tres del PSOE por Madrid, en cualquier caso, ha desechado una hipotética fractura del grupo socialista, después de que la ultraderecha haya sugerido que Vox no sería "obstáculo" para una investidura de Feijóo si "es capaz de convencer a un puñado de diputados socialistas y configurar una mayoría". Bolaños, en cambio, ha apostado por la "discreción en las negociaciones" con Junts per Catalunya, que tiene en sus manos la llave de un potencial Gobierno de izquierdas y ya mantiene contactos con ERC.

Entretanto, y aunque no les dan los números, los 'populares' siguen aferrándose a la idea de que Feijóo se presente a una investidura fallida de antemano. La número dos del partido, Cuca Gamarra, ha insistido este miércoles en que su candidato tiene la "responsabilidad" de "afrontar una investidura" si el rey se lo pide, aunque ha reconocido la "dificultad numérica" para conformar una mayoría.

Así, Gamarra ha vuelto a pedir al PSOE que no bloquee un gobierno del PP aunque, y pese a las palabras de Vox, ha aclarado que su partido no está hablando con diputados "individuales" del PSOE, sino que Sánchez y Feijóo se emplazaron a hablar una vez finalizado el escrutinio del voto de residentes en el extranjero. No obstante, ha destacado que es "importante" que Vox haya comunicado que no bloqueará la investidura si Feijóo logra reunir los votos necesarios.

La realidad aritmética es que, tras el rechazo rotundo de los nacionalistas vascos el pasado lunes, ahora mismo Feijóo no tiene opciones de convertirse en presidente del Gobierno: la suma de sus 136 escaños -un resultado muy por debajo de las expectativas que tenía el PP para las elecciones del 23J-; el diputado de UPN, que ya le ha dado su 'sí', y el hipotético apoyo de Coalición Canaria serían insuficientes para auparle a la Moncloa.

Enfrente, una investidura de Sánchez pasa necesariamente porque el independentismo la facilite, una circunstancia que Gamarra ha afeado este miércoles, aseverando que un pacto con el partido de Carles Puigdemont supone cambiar "la capital de España de Madrid a Waterloo". Además, ha vuelto a enarbolar el mantra de la lista más votada. "Quien gana gobierna, no se le impide conformar gobierno", ha esgrimido la secretaria general del PP, a pesar de que varios de sus barones han gobernado tras perder los comicios.