Con un simple clic, un usuario se puede descargar toda la información que Facebook admite tener sobre él: aplicaciones instaladas, nombres de familiares o agenda telefónica. Datos que más de 2.000 millones de personas ofrecen diariamente.

"Todos estamos trabajando para Facebook, trabamos para que pueda conseguir su producto y vendérselo a quien se lo pague, a sus verdaderos clientes que no somos nosotros", explica Marta Peirano, periodista experta en privacidad y seguridad en Internet.

Pero a Facebook no le interesa esa información en bruto, sino el perfíl psicológico. Según los expertos la red social es capaz de recoger los datos, analizarlos y predecir el comportamiento de sus usuarios. De esta manera saben que producto le interesa a cada uno en cada momento.

"Un producto no tiene por qué ser un bote de detergente, puede ser un candidato político, puede ser una decisión democrática, puede ser el brexit, puede ser Donald Trump", añade Peirano.

En su comparecencia ante el Congreso de Estado Unidos, Zuckerberg ha asegurado que los usuarios tienen el control de su información: "Puedes borrar o eliminar la cuenta de Facebook si quieres".

Pero desde la misma red social informan que aunque se elimine la cuenta habrá algunos materiales que permanecerán en su base de datos. Desaparecer de Facebook es prácticamente imposible, incluso para aquellos que nunca se han hecho una cuenta.

"Recopilamos datos de personas que no están registradas en Facebook por motivos de seguridad" el propio Mark Zuckertberg lo ha reconocido, aunque usted no sea usuario Facebook puede acceder a su información.