Europa
Lujo de cinco estrellas en Pontresina
El Grand Hotel Kronenhof, uno de los mejores y más imponentes hoteles de Suiza
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Suiza tiene unos paisajes idílicos, por lo que alojarse en cualquiera de sus hoteles se puede convertir en una experiencia inolvidable. Pero claro, hay que saber elegir el lugar con tacto y buen ojo. Para ir sobre seguro, hay ciertos indicadores que no fallan. Como que, por ejemplo, un hotel haya sido identificado por Tripadvisor como el mejor hotel del mundo –según las puntuaciones de sus usuarios-. Es el caso del Grand Hotel Kronenhof, situado en Pontresina, una localidad en cuyo aire se puede oler el aroma de los pinos. Está ubicada en el cantón suizo de los Grisones, en el distrito de Maloja, al sureste del país. Sus paisajes son incomparables, no importa la época del año en la que se visite, porque cada estación tiene su encanto. Lo cierto es que es un lugar en el que raramente hay nubes, por lo que haga frío o haga calor casi siempre se puede ver un sol radiante que da una sensación de buen tiempo y deja fotografiar el paisaje sin reparos. El edificio en el que se encuentra el Grand Hotel Kronenhof data del año 1848, cuando fue construido en el núcleo central del pueblo de Pontresina. Pero en el año 2007 fue remodelado para incluir en él todas las comodidades actuales, servicios y prestaciones que se pueden esperar de un hotel de cinco estrellas. Desde entonces este hotel, sin haber perdido ni un ápice de su esplendor, luce como nuevo y con energías renovadas para conquistar cada noche a más huéspedes. Sus habitaciones elegantes no olvidan la decoración con toques alpinos, para que los clientes recuerden en todo momento que duermen en un lugar histórico pero cerca de las montañas. Por ese motivo, la madera juega un papel fundamental y aparece en muebles y detalles que se pueden encontrar en cada habitación. Sus techos con escayola, sus lámparas palaciegas y sus estancias amplias y soberbias contribuyen a transmitir la sensación de encontrarse en un castillo. La última incorporación a sus instalaciones ha sido el espacio de wellness y belleza, en el que se puede disfrutar de varios tratamientos o simplemente relajarse con unas vistas increíbles. Su cristalera es una auténtica obra maestra de la arquitectura, como si se tratara de un invernadero. Pontresina es poco conocida debido, en parte, a su cercanía con la famosa St Moritz, que muchas veces acapara todo el turismo y también la atención mediática. Pero eso no significa que alojarse en este lugar sea un completo acierto, porque de hecho lo es. El Grand Hotel Kronenhof tiene cinco estrellas y su edificio de estilo neobarroco llama la atención entre los glaciares de la Bernina y las montañas de la Engadina. En su restaurante, el Grand Restaurant, se sirven platos de cocina suiza tradicional y también internacional. Y, si tienes la suerte de alojarte mientras hace buen tiempo, en su terraza Pavillon podrás tomar una bebida o un aperitivo ligero. El spa, con 2.000 metros cuadrados, tiene piscina, grutas con varios tipos de agua y salas de relajación. Una de sus 112 es un capricho para los amantes de la naturaleza y el lujo, dos conceptos que en este hotel no están reñidos.
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