SKYPE QUIERE QUE LO USES, SEA COMO SEA
Ya puedes hablar por Skype aunque no tengas cuenta
El servicio de llamadas y mensajería que hace años compró Microsoft ya permite a los usuarios que no están registrados en la plataforma unirse a una videoconferencia. Solo hay que pinchar en un enlace que envíe uno de los que sí tienen cuenta.

Publicidad
Atrás quedaron los tiempos en los que para llamar por Skype tenías que crear una cuenta y descargarte la aplicación. No solo eso, sino que tenías que enseñar a tus padres hacerlo paso a paso, para que en mitad de tu Erasmus, de tus vacaciones en el extranjero, o lo que quiera que estuvieras haciendo allí un tiempo prolongado, no te vieras obligado a dictar –roaming de por medio– las instrucciones para poder establecer una conexión por Skype. Eso sí, lograr una videoconferencia, sin incidentes con la webcam, esto ya era para nota.
Ahora todo es más fácil. No tienes que decirle a tu padre que meta su correo de ‘Terra’ en ningún sitio ni colocarle el icono del programa de Skype en mitad del escritorio para que no se le escape. Sencillamente tendrá que pinchar en un enlace que le llegue al correo electrónico o incluso al WhatsApp.
A partir de ahora Microsoft permitirá que cualquiera, sin cuenta de Skype ni la aplicación descargada, pueda unirse a una videoconferencia o conversación en la plataforma. Por el momento la funcionalidad se ha lanzado en Estados Unidos y en Reino Unido, pero en un par de semanas habrá llegado al resto de países.
Para enviar la invitación (en forma de enlace) a una videoconferencia solo hay que contar con la nueva versión del software, ya sea para Windows o Mac, aunque también se puede invitar desde la interfaz web. Evidentemente será esta última interfaz la que utilicen los usuarios sin cuenta para hablar por Skype.
El usuario de Skype tiene que buscar el botón ‘+New’ para generar un enlace único, que se puede enviar por cualquier medio. Todo aquel que tenga el enlace y pinche en él se unirá a la conversación, aunque quienes no tienen cuenta antes tendrán que dar su nombre o un nick.
Con esta funcionalidad en Skype esperan que el uso de la aplicación se incremente. En definitiva se trata de reducir las barreras de entrada para medrar en la batalla de los servicios de mensajería, que ahora también ofrecen llamadas. El software de Microsoft es tal vez quien tenga la plataforma más pulida, pero las aplicaciones móviles se cuentan entre las preferidas de los usuarios.
La popularidad de WhatsApp es indiscutible y sus llamadas lo convierten en un competidor directo de Skype (que hasta ahora tenía la entrada de usuarios a su servicio más restringida, sobre todo teniendo en cuenta que para usar WhatsApp solo había que descargarse la aplicación y confirmar el número de teléfono, sin contraseñas ni un registro a la vieja usanza). Lo mismo ocurre con Line, una app que se hizo famosa por ser pionera en las llamadas gratis, así como por sus emoji.
Este mismo año Skype añadía traducciones simultáneas a las videoconferencias con el fin de atraer nuevo público y ofrecer un valor diferencial para retener a sus usuarios. Es su forma de luchar contra el empuje arrollador de las aplicaciones que han nacido para y desde el móvil.
Publicidad