HBO Max ha emitido ya el episodio final de una segunda temporada de récord, que según ha filtrado la plataforma a Variety está a la altura del mayor éxito de HBO, Juego de tronos. Euphoria se ha convertido en la segunda serie más vista por detrás del drama épico con una media de 16,3 millones de espectadores. Tras una temporada oscura para Rue (Zendaya), la protagonista de Euphoria termina la segunda temporada como casi el único personaje con un futuro esperanzador después de la obra de teatro de Lexi (Maude Apatow) que, durante los dos últimos episodios, ha enfrentado al resto a sus miserias. Para ella, sin embargo, ha sido como revivir sus últimos dos años pero sin estar colocada.

Sin duda, entre los peor parados están Cenicero (Javon Walton), que muere tras enfrentarse a los SWAT atrincherado en el baño durante el asalto policial; y Fezco (Angus Cloud) que termina malherido y detenido. Junto a ellos también está Faye (Chloe Cherry), que tampoco consigue huir después de alertar demasiado tarde del chivatazo de su novio Custer (Tyler Chase) y de presenciar su asesinato. El final era inevitable porque, por mucho que en la segunda temporada hayamos seguido descubriendo el lado tierno de Fezco y la historia que le ha llevado hasta donde está, hablamos de un narcotraficante.

Está por ver si Lexi es consciente de ello. Y es que el personaje de la que fuera la mejor amiga de Rue antes de que ésta se enganchase a las drogas ha protagonizado toda una transformación durante la temporada. En parte, gracias a la relación que inicia con Fezco en la fiesta de Nochevieja en la que el camello desata su furia contra Nate (Jacob Elordi); y en parte, gracias a descubrir su pasión por el teatro y plasmar su dolor y su frustración en la obra escolar que se desarrolla en los dos últimos episodios.

Lexi Howard parece encontrar por fin su lugar, pero tendrá que afrontar un duro golpe en la tercera temporada..

Uno de los miedos de Lexi es, tal y como le confiesa a Fezco, durante sus largas conversaciones, que la obra pueda llegar a molestar a alguien. Y sabe perfectamente que ese alguien es su hermana Cassey (Sydney Sweeney). Para hablar de sí misma, Lexi se compara con su hermana y confiesa que siempre ha existido bajo la sombra de su belleza y su popularidad, que para Cassey han sido más una condena que otra cosa. Presa de la furia, la atractiva joven asalta el escenario para increpar a su hermana y termina aireando delante de todo el instituto su conflicto con Maddy (Alexa Madie) por Nate. Sin embargo, después de que la bronca llegue hasta los pasillos del centro y una vez que llega la calma, Maddy parece mostrar compasión por Cassey después de que confiese que Nate ha roto con ella. "Es solo el principio", le dice.

Presenciar la obra y especialmente el número musical que cuestiona su sexualidad, supone una catarsis para el personaje de Nate. Ni Lexi ni quienes se ríen durante la actuación que busca romper con el estereotipo del deportista popular del instituto pueden realmente imaginarse que detrás de la broma hay una cruel realidad que ha atormentado a Nate desde su infancia. El joven finalmente se enfrenta a su padre (Eric Dane) y confiesa que conoce su secreto desde los 11 años cuando vio uno de sus vídeos y quedó traumatizado para siempre. Por eso, después de ver la obra decide actuar y entrega a la policía las copias de las cintas que Cal Jacobs conserva como trofeos y que llevan a las autoridades a detenerle.

Mientras que después de la obra la amistad entre Lexi y Rue parece volver a sus orígenes, hay otras relaciones que no corren la misma suerte. De hecho 'Nuestra vida' (el nombre de la obra) es prácticamente una oda a la amistad de Rue. Está por ver lo que pasará en la tercera temporada, para la que habrá que esperar al menos un año, pero el final deja claro que Elliot (Dominic Fike) y Rue deben estar separados, por mucho que ella le haya perdonado por haber alertado a su madre de que volvía a estar enganchada. Él confiesa que sigue consumiendo y de hecho, en la escena en la que Rue va a verle a su casa es inevitable pensar que en cualquier momento ella le va a pedir droga. Afortunadamente, eso no pasa y Rue termina el capítulo diciendo que siguió limpia durante el resto del curso, algo por lo que uno episodios atrás no habríamos dado un duro. Después de Rue, la que más disfruta la representación es Suze (Alanna Ubach), la madre de Lexie y de Cassey, capaz de reírse de sí misma y encantada de verse como protagonista, incluso aunque la obra muestre sus momentos más vulnerables.

El personajes de Jules (Hunter Schafer) ha quedado un poco desdibujado en esta segunda temporada y su relación con Rue ha terminado de la peor manera posible ya que la protagonista se sintió traicionada cuando su novia decidió contarle a su madre que había vuelto a consumir y llevaba meses enganchada. Jules aguantó todo tipo de insultos por parte de Rue mientras que ella le repetía una y otra vez que la quería. Durante la representación teatral, Jules está todo el tiempo pendiente de Rue sobre todo en los momentos más dolorosos para ella. Y al terminar se sienta a su lado para repetirle que la quiere y que la echa de menos. La reacción de Rue deja claro que aún no está preparada para enfrentarse a Jules, perdonarla y, sobre todo, disculparse. De hecho, reconoció en su conversación con Elliot que lo de Jules iba a ser más difícil. Por eso, simplemente la besa en la frente y se va. En la voz en off con la que acaba el episodio, Rue habla en pasado de Jules y dice que "fue su primer amor" y aclara que, al menos así le gusta recordarlo porque en realidad se ha pasado "todo el tiempo colocada".

Qué veremos en la tercera temporada

Antes del final de la serie y en vista de los buenos datos de audiencia, HBO no ha perdido el tiempo y ha anunciado que habrá una tercera temporada de Euphoria. Eso sí, va a tocar esperar aunque ojalá no tanto como para la segunda, cuya producción se vio afectada entre otras cosas por la pandemia. Si bien es cierto que la serie deja casi todas las tramas encaminadas al cierre, quedan bastantes incógnitas de cara a la tercera temporada.

Para empezar, no se ha vuelto a saber nada de Laurie (Martha Kelly), la profesora reconvertida en narcotraficante que le dio a Rue drogas por valor de 20.000 dólares para que ella las vendiese y que nunca más vio ni el dinero, ni las drogas. En plena huida para evitar la clínica de desintoxicación Rue acabó en casa de Laurie, pero logró escapar sin que se vuelva a saber nada de ella. Y no parece ser un personaje que se rinda fácilmente y deje escapar su dinero así como así. ¿Qué pasará con Nate? Es verdad que el joven lleva a la policía hasta su padre, pero la historia se queda un tanto inacabada. Además, en el trayecto Nate conduce mientras bebe cerveza y carga con balas un revólver, que después no utiliza. Nos quedamos sin saber que pasará con Fezco y cómo reaccionará Lexi cuando se entere del motivo por el que no ha ido a su obra de teatro. Y cómo no, además de saber el destino de la relación entre Rue y Jules, imaginamos que la tercera temporada seguirá girando en torno a la tormentosa relación de Rue con las drogas.