La de Pedro Alfaro es la cara de la esperanza del coronavirus, el rayo de luz que anima a seguir peleando contra la pandemia que ha paralizado al planeta.
En laSexta Noche, cuenta cómo ha sido su experiencia con el COVID-19 en su interior, un virus que no es como una gripe normal. "Perdí el sentido del olfato, algo que otras personas me cuentan que les está pasando, eso está remitiendo", afirma.
"No me sentía muy bien y fui a que me hicieran la prueba al Hospital Puerta de Hierro. Me lo confirmaron por teléfono y dije 'ya está'. Fue una semana dura e inolvidable por muchos motivos", comenta.
En esa semana, ha cumplido 40 años, reconociendo que fue "impresionante" el momento en el que el personal sanitario le trajo una tarta a su habitación.
Su nuevo día a día se basa en permanecer a cierta distancia con otras personas. Para acabar, Pedro Alfaro dedica a los espectadores de laSexta un emocionante solo de violonchelo.