Valencia, Madrid. Galicia, Alicante, Toledo, Burgos, Mérida, Castellón, Málaga, Marbella, hay pocos rincones en España donde la Gürtel no cerrase algún acuerdo. El país se le quedó pequeño y la trama decidió poner sus ojos en el extranjero.

En Colombia, la Red quiso desembarcar a lo grande a comienzos de 2009. Según el informe de la UDEF, la Gürtel quería invertir en un casino en Medellín valorado en 15 millones de euros, intermediar en la adjudicación de un aeropuerto en Caldas y comprar propiedades en Cartagena de Indias.  Ese saldo era de un millón de euros

En Panamá, la Gürtel quería mediar en la concesión del suministro de combustible en el Aeropuerto de Tocumén. Para ello, el propio Francisco Correa se implicó personalmente en reuniones con autoridades de la capital panameña. Ya en EEUU, la Gürtel quiso perforar Texas, para conseguir gas a gran escala en la estructura de Wilcox. Un proyecto que no parecía convencer mucho a Correa, según los mails recabados por la UDEF. En la agenda de Crespo, la UDEF también encontró interés por una operación en este país valorada en 5 millones de euros, de los que 2 millones se pagarían en dinero legal y el resto en negro. No hay más datos sobre esta operación, solo un número de teléfono español.

En el Emirato, la Gürtel se interesó por propiedades de lujo. Para ello, dos personas llamadas Victoria y Paco, eran las personas de contacto en la región. La red también planteaba inversiones en Wall Street, en el Nikkei japonés o en los mercados emergentes. Para la Gürtel las distancias se hacían cortas cuando era un buen contrato lo que estaba en juego.