Alfonso Guerra ha visitado esta semana El Hormiguero y ha expresado que le dan "mucha pena los humoristas": "Ya no pueden hablar de nada. Antes había chistes de homosexuales, de enanos, de todo. Ahora no", criticaba, y pedía libertad de expresión. "Yo no quiero censura", decía.

"¿Creéis que no es plenamente consciente de que estamos en otra época y que es una provocación?", pregunta Adela González a los colaboradores de Más Vale Sábado. "En su círculo de gente, personas que le han tratado y trabajado con él, muchos de ellos te cuentan que tiene comportamientos machistas y homófobos", asegura la periodista Isabel Morillo, que recalca que eso lo "cuenta gente que lo ha tratado muy de cerca y ha trabajado con él estrechamente".

Y, es que, en su opinión "hay gente que envejece mal y gente que envejece bien, que se adapta a los tiempos y otros que se quedan anclados en el pasado". "Guerra es un ejemplo de una persona extremadamente interesante con una inteligencia superior, que en su época fue su época fue un gran vicepresidente y un referente del PSOE, pero ahora mismo no representa a la sociedad en la que estamos", sostiene. "Se puede hacer chistes de todo, pero a la gente ya no le hace gracia", concluye Isabel Morillo su intervención.