Un abogado defensor de alguien que está imputado y condenado alaba el rigor del juez Castro en su trabajo. Se trata de Rafael Perera, abogado de Jaume Matas. "Recuerdo, hará unos tres años, que acordó realizar una entrada y registro en la vivienda de Matas. Lo acordó un día de Nochebuena a las 22:00 horas".

"Me dijo: Rafael, hemos de hacer la entrada y registro. Le dije: por favor, es Nochebuena, que estoy a punto de sentarme a cenar con mi familia. Manda a la Policía que precinten, que no entre ni salga nada de allá y vamos el día 27", explica el abogado.

El juez Castro se negó: "ha de ser esta noche". Entonces, "no me quedó más remedio  que ceder y facilitar el acceso", continúa relatando. "Terminamos a las tantas, pero él consideró y entendió que había de hacerse. Yo después le elogié y le dije: creo que has estado muy bien".