'Ximo' llega a su cuarto día de infiltración en UrbanClean y se dispone a investigar el funcionamiento de un punto de recogida y entrega de pedidos, el buque insignia de la empresa. Allí le recibe Laura, que le enseña los pequeños 'truquitos' que utiliza para su día a día.

"Normalmente yo siempre le digo un día más tarde al cliente, porque así vienen el día antes y dicen 'uy, me lo has hecho más rápido'", le explica a su aprendiz sin saber que es en realidad su jefe infiltrado, que se queda pasmado ante tal trampa. Laura es experta en su trabajo y sabe cuándo un cliente ha "tocado" una mancha. "Ellos mienten con las manchas, diciendo que no las han tocado, pues yo también puedo mentir un poquito", afirma.

Pero la revelación que más sorprende al jefe viene a continuación. "Se les puede cobrar más según la marca del pantalón", le asegura. "Limpiar una prenda en UrbanClean siempre cuesta lo mismo, da igual de qué marca sea", dice el jefe con sorpresa en su entrevista personal. No parece demasiado satisfecho de que Laura ignore premeditadamente los protocolos de la empresa.

Es en ese momento cuando llega un señor con una prenda descosida y le pregunta si podría "darle una puntadita". "Sí, no se preocupe, como es tan poquito, solamente le cobro la camisa". Sus palabras indignan aún más a su jefe. "Creo que Laura tiene la tienda como si fuera un negocio propio donde ella puede tomar ciertas decisiones que en realidad no puede", comenta ante las cámaras de El jefe Infiltrado.