El programa llega a su recta final y, después de que los participantes de Batalla de restaurantes hayan valorado y puntuado todos los aspectos de sus rivales, desde su comida, a su servicio, pasando por el marisco o el precio, es el momento del cara a cara. Uno de los más tensos lo protagonizan David Couñago, de MalaSangre, y Claudia, de Casa Luisa.

El chef critica cada aspecto del negocio familiar de Claudia, pero, según él, "desde el respeto a los 17 años de tradición". "Aquí no respetó nadie los 17 años de tradición", reprocha Claudia a sus compañeros mientras muestra la tabla de puntuaciones que Casa Luisa ha recibido. La media es de un 4'4.

David le recuerda que ellos hicieron la inspección en la cocina y que fueron testigos de lo que él considera "una falta de higiene muy grande". "Yo no vi en mi puta vida una campana así, eso es grasa incrustada de años", añade. Claudia cuenta la historia del incendio y explica que la negrura procede de las llamas.

"El incendio fue hace más de siete años, entonces, en siete años no tuvisteis tiempo a quitar la mierda de la campana. En siete años. Multiplica 365 por 7, guapa", la increpa. La hostelera se siente ofendida. "Lo primero, no me faltas al respeto, por favor", pide ella. "Guapa", repite él, desafiante.

"No se le habla así a la gente, yo así, no te voy a contestar", se planta Claudia. "A mí no me la cuelas. Se la cuelas a los demás", insiste.